El maní es así

Otro día más o menos normal, sentado en la barra de «El Canujo», un pequeño bar cercano a casa que solía visitar en los días de insomnio. Ya muriendo la…

De despechos y colores

Se acababa de ir abril, y con él una vez más, una ilusión amorosa. No puedo asegurar que marzo y abril sean meses evidentemente relacionados a romances, pero sí estoy…

Mañana el otoño y pasado el verano

Y era un almuerzo chiquito: margaritas, fruta madura, granola, durazno pero la demencia asechaba detrás de mis sombras. Un ser pequeño y triste de pronto se convierte en bala, flecha,…

Palo de felicidad

El palo de la felicidad en un tronco escamado del que salen unas hojas verde-grama con rayas manchadas de blanco. Tuve uno en Buenos Aires, que viajó de Entre Ríos…

Dos gardenias para mí

A pesar de todo lo provocativa que resulta la idea de pasar los despechos cual madre de «Pato Aparato» —sin bañarse, envuelta en una bata azul y comiendo chocolates—, eso…

Me caigo y no me levanto

Tengo en mi poder algunas pesadillas que me gustaría enviar al remitente, o al menos despojarlas con la mañana. Eventualmente se quedan flotando en algún lugar de mi cuerpo, me…

La otra como ella

No sé cómo comenzó este desaguisado pero puedo jurar por Dios Santísimo que me levanté de muy buen ánimo. Sin darme cuenta estaba en la oficina arreglando unos papeles y…