Decepciones

Siendo un niño de diez años, mi padre me hizo un regalo muy especial: un flamante juego de química. Era una inmensa caja con decenas de frasquitos llenos de coloridos…

El insidioso

Una de las mayores entretenciones que teníamos mis amigos de infancia y yo, en época de vacaciones, era ir al famoso cine «Ayacucho», ubicado en la ardiente tierra cumanesa. La…